Inmarcesible es el título de la primera novela publicada por Karina Krenn, y significa en palabras de la autora «lo que nunca se puede marchitar, lo que está por siempre vivo y pleno». Este concepto configura el eje de la novela y la dignidad de la protagonista, que para Krenn ha sido un desafío personal y también un punto de encuentro y reelaboración con un accidente cerebrovascular que sufrió hace unos años cuando era preceptora en el IPET 333 de Villa los Llanos. El episodio sufrido disminuyó su capacidad de memoria reciente, dificultándole el recordar nombres, números, direcciones y espacios. Esa vivencia personal y los aprendizajes posteriores fundarían más tarde la ficción ahora editada, en la cual la protagonista sufre de Alzheimer.

Krenn empezó a escribir en el 2011, cuando sufrió el primer ACV: «en el primer accidente yo sentí una descompostura, y cuando me di cuenta estaba en terapia. La segunda vez también, estaba en casa, me sentí mal y cuando me di cuenta estaba en otra terapia intensiva». La novela tiene un pie en la investigación científico, a través de conversaciones que mantuvo con psicólogos, psiquiatras y neurólogos, desde donde trabaja las etapas y el deterioro que produce la enfermedad, y otro pie en la poesía, una pasión que vive desde niña.

Uno de los capítulos del libro empieza:

Me palpitaba muy fuerte el corazón. Sentí mi cabeza girar vertiginosamente. Me detuve. Necesitaba recobrar el aire y empezar de nuevo. Un temblor en mis manos reflejaba la angustia que estaba viviendo. ¿Cómo es posible que no encuentre la sucursal del banco? – pensé, mientras supuse que tal vez se habrían mudado.

Hablar con Karina es llenarse de información, en pocos minutos uno se hace de diversos datos sobre esta terrible enfermedad que al día de la fecha no tiene cura. Nos cuenta que según la OMS cada tres segundos se diagnostica un caso de Alzheimer. «El Alzheimer es un flagelo del siglo xxi», dictamina y se enorgullece de que su obra este siendo usada por la Fundación ALMA para trabajar el tratamiento no solo del enfermo sino también de los familiares.

¡Yo estaba tan feliz de reencontrarme! Mientras recorría el camino de olvidarme, en cada paso me conocí a mí misma.

Sin ser un discurso religioso, la novela de Karina Krenn se registra en tonos metafísicos y místicos que proponen al lector un momento de reflexión y pensamiento, sin someterlo a una verdad terminada.

La intendenta Myrian Prunotto asistió a la presentación de Inmarcesible en el Jardín Botánico y dijo: «Conozco la historia de nuestra querida Karina Krenn, y su amor por la palabra. Es un libro que toca las cuerdas del alma».

Inmarcesible sale $250 y se consigue en Duarte Quiros 175, en la Fundación ALMA o por internet en la pagina de Elaleph.