Un año más, la Municipalidad puso en funcionamiento la Escuela de Verano para que los más chicos aprendan divirtiéndose durante las vacaciones escolares. La temporada 2020/2021 es muy especial, ya que los niños hace casi un año que no comparten actividades con sus pares y amigos, por la pandemia del coronavirus.
Actualmente, hay más de 100 niños de la ciudad que disfrutan del predio del natatorio municipal. Según las indicaciones del COE, están divididos en varios grupos que asisten en tres turnos diferentes. Cada equipo va tres veces por semana, durante tres horas.
En cada turno, el colectivo municipal realiza un recorrido para que todos aquellos pequeños que no cuenten con movilidad propia, puedan disfrutar de las actividades que allí se proponen.
Una vez que llegan al predio, los profes sanitizan a los niños y les toman la temperatura. En el natatorio hay enfermera constantemente y personal de limpieza en los vestuarios y piletas para garantizar los protocolos sanitarios.
Los grupos, que se manejan de forma independiente y con distanciamiento social, aprenden no sólo natación, sino también otros deportes alternativos. Además, se realizan actividades extramuros en relación a la protección del medio ambiente, la nutrición y los cuidados odontológicos.